CARACAS.- Chelsea tuvo que correr y sudar
bastante para inscribir por primera vez su nombre en la Champions y ser
los reyes del fútbol europeo luego de vencer al Bayern de Munich en la
tanda de penales tras el empate a un gol en 120 minutos.
Los 90 minutos reglamentarios no fueron suficientes, los 30 minutos de alargue se quedaron cortos, y finalmente la tanda de penales terminó de consagrar al Chelsea y a Drogba, quien metió el balón que le otorga la gloria a su conjunto, quizas la única alegría que le debía el marfileño a los seguidores de los "Blues"
Los primeros 45 minutos del encuentro fueron dominados por el Bayern, quien sin arropar totalmente al Chelsea tuvo las más claras del arranque
En el minuto 18 Gómez tuvo un balón en área pero terminó enredándose solo y la defensa del Chelsea pudo despejar el balón. Dos minutos más tarde Robben pudo abrir el marcador al sacar un remate estando solo con el portero Cech al frente, quien pudo sacar el remate del holandés.
Muller y Gómez, quien no tuvo su mejor noche, tuvieron la oportunidad de abrir el marcador, pero sus remates se fueron desviados.
Por su parte, el Chelsea tuvo la más clara con un remate en área de Kolou al 38 que fue detenidio por Neuer.
Bayern salió dominando en los primeros minutos del segundo tiempo. De hecho, Ribery metió un balón en las redes, pero la acción fue anulada por posición adelantada.
En el 81, Muller, quien fue uno de los que más ofensiva aportó, se encargó de poner arriba a los suyos al rematar un centro de cabeza que inauguraba el marcador y prendía la fiesta en el Allianz Arena. Pero como en la mayoría de las fiestas hay un invitado no deseado, Didier Drogba emparejó las acciones al rematar de cabeza un saque de equina que terminó en la redes.
Drogba pudo pasar a ser el villano en el alargue, al cometer una falta en el área sobre Ribery, que sacó al francés del encuentro. Pero el papel de villano sería para el holandés Arjen Robben, quien se encargó de cobrar el penal y su disparo fue parado por el portero Petr Cech
El delantero Drogba ocuparía el papel de héroe, el casi siempre toma con su equipo, al concretar el tiro penal que le daba la victoria y el título al Chelsea luego de que Schweinsteiger la pegara del palo.
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